RUANO, Charo

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RUANO, Charo

Biografía

Nace en Berganciano, en la provincia Salamanca. Periodista y escritora, dirige y presenta el programa cultural «El cuarto de atrás» de Televisión Salamanca; colaboradora habitual en prensa y radio ha dirigido la revista Los libros en Castilla y León durante varios años.

 

Obra

POESÍA

Hicimos de la noche un largo poema (1982).
La cálida quietud de la tristeza (1991).
La frontera (1993).
Los rostros de la huída (1996).
Frente al azar de otros amores (2001).
Sobre el cansancio (2004).
Té de jazmín en porcelana inglesa (2006).
Y ahora algunos pasos de poema a poema. Antología (2009).
Tiempos muertos (2010).
Cada noche los lobos (2012).

INFANTILES

Catalina lina luna (1993).
La polilla de los libros (Junto a Rosa Martín Barrientos) (1998).
Letras para armar poemas (Antología de varios autores) (2001).
Poesía una al día (2002).
De aquellas y estas infancias: miramelindos en Valdelaluna poemas, versos y letras. (Junto a Mercedes Aurora Blanco Rodríguez) (2002).
El bizcocho de canela (2006).

OTROS

Salamanca en blanco y negro (2002).

COMPILADORA

81 citas y un manifiesto en defensa del libro (2001).

ANTOLOGÍAS

Las palabras de paso: poetas en Salamanca 1976-2001 (2001).

Premios

 

 

Poética

DESPIERTA en la mañana
aletargada y sola
con terrores ocultos
y la espalda deshecha
por un dolor antiguo

Se niega a abrir los ojos
quiere ignorar el mundo
y ya nunca la dejan

Se incorpora despacio
lentamente al camino
van todos tan deprisa…

Lava sus ojos
con tibias manzanillas
bebe leche caliente con miel
y ahuyenta el frío
envuelta en cálidos ropajes

A media tarde es
lúcida y transparente
fugaz conversadora
hacedora de versos
que no tienen sentido

Y en la noche más fría
abre bien las ventanas
para que entre la escarcha
y congele las lágrimas
cual perlas infinitas

(De La cálida quietud de la tristeza, Salamanca, Amarú, 1991, p.p 42-43)

No te fíes de mi
tengo malas costumbres
busco estrellas
en las tardes de lluvia
y cuando me preguntas
¿dónde estabas?
apenas sí respondo

En el cálido lecho
junto a tu piel desnuda
voy desgranando cuentos
que escuchas impaciente
Despues nos abrazamos

No te fíes de mi
suelo cerrar las puertas
para que no entre nadie
y pasar largas horas
con los ojos cerrados
invocando fantasmas
y a menudo me escuchan
me separan de ti
y me dejo llevar
no importa donde

No te fíes de mi
le he jurado a la noche
fidelidad, amor
y cien cosas peores

En el humedo lecho
entre tus brazos sigo
contandote una historia
Voy de farol

· · ·

Mañana me habré ido

(De La cálida quietud de la tristeza, Salamanca, Amarú, 1991, p.p 47-48)

 

Texto

El metal de la
voz
se ha desgastado
la fuerza de las
manos
se ha perdido
la pluma descarada
busca amantes
¿y los versos?
en el alma dormidos

Me gustan el fuego
y la ceniza
El riesgo la aventura
y los abismos
Y eso queda
de la voz
y las manos
la pluma y
los versos
después de
destruirlos

(De Hicimos de la noche un largo poema, Salamanca, Amarú, 1982, p. 71.)

HUBO un día que fue
perfecto
y una noche sin palabaras
hubo amores sin descanso
y amantes de madrugada

Cuando la luna avanzó
entre tinieblas quebradas
una voz entre las sombras
me habló de ti sin nostalgia
Cuando el viento se hizó
amable
suave brisa
llanto y alas
revelo sobre mi piel
una huella, otra mirada

Y ya no podrá la lluvia
destruir rastros y pisadas
y trazar caminos nuevos
como tantas madrugadas
Borrar los besos antiguos
los que no dejaron nada
solo el corazón hastiado
el deseo sin esperanza

Hubo un día que fue
perfecto
tus manos sobre mi almohada
tus labios hablando quedo
sobre mi piel abrasada

Se estremecieron las sombras
se estrecharon las nostalgias

Hubo un día casi feliz
y una noche sin palabras.

(De La cálida quietud de la tristeza, Salamanca, Amarú, 1991, p.p. 27-28.)

LA MUJER tenía aspecto
de haber llorado mucho
sus ojos apenas
podían ser más profundos

LLevaba de la mano
una niña pequeña
y un gran bolso
donde seguramente
trasladaba <>

Y era joven, muy joven
apenas treinta años
que sólo le habían dado
unas horas de amor
y tanto sufrimuento

La niña se aferraba
a una muñeca vieja
despeinada y oscura
y cantaba feliz
una canción sin nombre

Ellas no cruzarían
habitantes eternas
de ese lugar terrible
que llamamos Frontera

(De La frontera, Salamanca, Amarú, 1993, p. 15.)

CONSTRUIMOSla pasión
sobre palabras
frase a frase
rito a rito
vacias, bellas, gastadas

Las palabras son
un frágil equilibrio
nos unen
nos atan
nos engañan
Las amamos
tanto y no entendemos
que fuera de los labios
deseados
Son nada

(De Los rostros de la huida, Salamanca, Amarú, 1993, p.p. 28.)

ATRÉVETE A NOMBRARLO
Atrévtete a nombrar
el suicidio y sus formas
el dolor y sus causas
el cansancio y sus horas

Atrévete a nombrarlo
atrévete a nombrar
el amor, sus derrotas
la pasión, sus locuras
la huida sola, sola

Atrévete a gritar
Pon orden en las cosas
sentimientos, ideas
que te llenan de euforia
Y te arrastran, te llevan
Y te dejan exhausta
helada, vacía, rota

Atrévete a nombrarlo
atrévete a nombrar
el abrazo que odias
los labios que te acunan
el cansancio y sus horas
imperturbables, quietas
acechando tu sombra
llenando tu silencio
de miedo, de zozobra

Hasta cuándo callar
hasta cuándo tu boca
se negará a nombrar
una a una las cosas
los sentimientos todos
y todas las derrotas

Atrévete a nombrarlo
atrévete a nombrar
al culpable que llora
y finge ser distinto
y es la misma sombra

Atrévete a nombrarlo
atrévete a nombrar
el amor y sus formas

(De Sobre el cansancio, Salamanca, Amarú, 1993, p.p. 49-50.)

 

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